La exposición “Raíces en cemento” se encuentra en la plaza de Bolívar desde el  3 hasta el 12 de Marzo.

Esta exposición tipo corredor Fotográfico, muestra las prácticas y vivencias de algunos de los pueblos indígenas que se encentran actualmente en la ciudad de Bogotá, como logran continuar sus tradiciones a pesar de estar inmersos en una ciudad, ya sea porque deben ingresar a esta por un desplazamiento debido al conflicto en sus regiones, por situaciones económicas, estudio, etc.

Fotografía: Mario Neuta

 Hace unas semanas escribía sobre las culturas que aún perviven en la ciudad, hablaba un poco de sus luchas y tradiciones, ahora la intención es mostrar cuales son las formas que estos pueblos tiene para visibilizarse ante la sociedad en general, y llamar la atención del gobierno para proteger sus derechos como indígenas.

Dicho lo anterior, no queda más sino hablar de “Raíces en cemento” una exposición fotográfica que surge a partir de distintos procesos, tanto de investigación como de fortalecimiento de los pueblos que habitan en Bogotá (Muiscas de Bosa y Suba, Kichwa, ambiká pijao, entre otros.)
Su nombre ya lo indica, es una analogía relacionada con las raíces que se abren paso a través del cemento que cubrió su entorno,  ya que así mismo las culturas que conviven en una ciudad se abren paso y buscan las formas de continuar sus tradiciones a pesar de las dinámicas que les presenta la ciudad día a día.

Fotografía: Mario Neuta

 Su inauguración, el día 3 de Marzo a las 10 de la mañana, se Dio con un ritual de armonización dirigido por sabedores de las comunidades muiscas de Bosa y Suba, en ella se compartió medicina tradicional, se saludó al territorio y a los cuatro elementales de la naturaleza, práctica común en este tipo de rituales para reconocer los elementos que fundamentan la vida y la cultura, además se dejó claro cuál es el fin que se busca a través de este tipo de acciones, la visibilización de las comunidades para tener una incidencia tanto social, como política.

 

Fotografía: Mario Neuta

El Lugar del ritual se llenó de personas que pasaban por allí, algunos vendedores ambulantes que se acercaban a tratar de vender algo se quedaban como cualquier otra persona para ver lo que estaba pasando allí, incluso uno que otro habitante de calle se acercaba como curioso, en el momento cuando un sabedor muisca se dispuso a repartir medicina a quienes hacían parte del ritual, se le acercaron personas que sin saber bien el porqué, querían hacer parte de las tradiciones que datan de hace más de 500 años  Bogotá o Bacata o Muequeta, como se le quiera llamar.

Luego de esta armonización espiritual, el Gobernador del Cabildo indígena Muisca de Suba pronunció unas palabras sobre el ritual, pero lo más importante fue su mensaje al distrito, que afortunadamente contaba con la presencia de algunos delegados de este, en resumen se refirió a los convenios que se dan entre las comunidades y estado para poder mostrarse como son, ante diferentes estamentos de la sociedad y la política, muchas veces el discurso institucional es incoherente al fortalecer la visibilización de estos pueblos en la ciudad y por otro lado urbanizar y prohibir el acceso a sitios sagrados como humedales, negar derechos como educación propia por simples pleitos burocráticos, entre otras actividades que parecen encaminadas a desaparecer sistemáticamente las tradiciones de las culturas indígena que habitan en la ciudad.

Fotografía: Mario Neuta

 Para cerrar solo quiero reiterar la invitación a esta muestra fotográfica. Sin dejar de mencionar que cuando las secretarías y el estado se unen con estos pueblos pueden llegar a resultados como estos. Arte, política y cultura pueden ir de la mano. 

  

Fotografía: Mario Neuta